El Docente y sus Valores

El ser humano en la actualidad vive en un mundo, donde los valores se encuentran en juego, en discusión y hasta en duda. El espacio ganado por el relativismo, indiscutiblemente es amplio, e influyente en cualquier persona que se encuentre en etapas de formación temprana, media, o que no se encuentre clara en sus principios y valores.  
El valor de la Honestidad, hoy en día, es venido a menos en muchos lugares, así como en cualquier estamento de formación, desarrollo, o convivencia, reflejándose como producto de una sociedad que en muchos momentos es golpeada por la práctica de los desvalores.

La Honestidad nace desde casa, siendo por tanto un pilar, es decir, refleja familia. Pero, no lo es todo. El desarrollo del ser humano, fuera de su hogar, demanda que las cimientes sean fuertes y sólidas, de ahí que ahora, se le exiga a la Educación, lo que la sociedad requiere, seres humanos con valores, donde uno de los primordiales es la Honestidad, y allí está la inherencia de cada persona, ahí está el escenario de los Educadores.

Un Docente no deja de complicarse al tener que  conocer los valores de sus Estudiantes, dado que es vital reconocerlos, por el mismo sentido educativo que debe aplicar en todo proceso de enseñanza-aprendizaje u orientación-aprendizaje que le toque realizar. Y lo más importante, comenzando por sí mismo.

Él debe comenzar, por ser justo y sincero, ya que así plasma, una antesala a sus valores. Así, puede hablar con respeto, decoro en los momentos necesarios, con asertividad cuando deba ser preciso, para ese acercamiento y diálogo, que son cada vez más necesarios, entre Dicentes y  Docentes.

Cada persona se refleja con su conducta su propia moral individual, y ésta es el fundamento de la moral social, a su vez sus acciones constituyen su conducta, que deben ser inducidas por su sentido moral.

El sentido moral resulta de la experiencia, por tanto resulta de la evolución sicológica y de factores emocionales, intelectuales y volitivos. Por tanto, el ser humano se realiza mediante la práctica de sus valores, es decir, su ética.

El valor moral del hombre resulta de la práctica de valores, mediante sus acciones que son producto de su propia voluntad.

La Axiología, que trata la teoría de los valores, trata de igual forma el antivalor, y por medio de sus corrientes filosóficas: Objetividad y subjetividad, ha ubicado su cualidad especial de estimar las cosas en sentido positivo y negativo, siendo su segunda corriente, el espacio en que se ha desarrollado la relatividad.

De ella ha surgido la Axiología Educativa, que trata el estudio de los valores desde un sentido pedagógico, ya que se estima que los valores son susceptibles de ser aprendidos, no solo como norma, sino también, desde un punto de vista crítico.

La presencia de la corrupción en el planeta, es parte de una convivencia que complica la Educación en Valores, y no es de menos, que el espacio docente en algunos lugares se ha contaminado. Esta última realidad, es tan grave, que influye en la mirada y en la conciencia social con respecto a la integridad ya no solo personal, sino también institucional en algunos casos.

«La honestidad es el primer capítulo en el libro de la sabiduría», es una frase de Thomas Jefferson, y es un punto de partida, ya que esto es un pilar muy fuerte como legado que deja un Docente, en donde se encuentre, por donde haya pasado.

La transparencia en el ser de un Educador, hace que sea verdadero y que signifique mucho para sus Estudiantes, ¿por qué?. Porque será un ejemplo de vida, estimulando a ser auténtico, verdadero, coherente entre lo que hace y debe hacer, acorde a sus principios, impulsa la transparencia, comprende sobre manera que sus objetivos educativos están en los valores y no en los instructivos.

Muy duro ser Docente hoy en día, la realidad material pesa en muchos casos, sin embargo, la existencia de seres con alma grande, hacen que la docencia, sea para quienes se encuentran con sí mismas, y se encuentren en un nivel distinto, y con luz y atracción al camino adecuado del saber y del ser sobre todo.

Hay Educadores que entendieron que la Educación es una vocación no un puesto, que partiendo del respeto, enrumban vidas, levantan seres caídos, olvidados, ignorados, … ,  despiertan conocimientos, creatividad, crean sed de aprendizaje, no se dejan de la adversidad, que viven luchando con adversidades económicas, de salud, etc., que transmiten felicidad, brindan y dan frescura al espíritu, muestran como deben ser las cosas, enseñan a volar, a elevarse en el mundo.

Por eso, un Educador es recordado por sus Estudiantes porque educó de CORAZÓN.

 

 

 

 

 

cuando ésta es sinérgica directamente con la Moral, que es la que norma la conducta de la persona. La visión axiológica,

El irrespeto

Desde hace mucho tiempo la práctica del respeto se ha ido aminorando en la existencia del ser humano, y mas bien ha ido incrementando el irrespeto en su convivir, no sólo consigo mismo sino también con los demás.

Indudablemente la educación es lo que falla en un alto porcentaje, la formación de la familia, la crisis educativa de los centros educativos en sus diferentes niveles, el relativismo religioso, ético y moral que está presente en la sociedad, tanto de seudo-religiosos como seudo-practicantes … , en fin, la raíz del problema está ahí, pues el respeto se empieza a ganar con educación.

En muchos casos, ante distintas circunstancias y situaciones, se llega a imponer el respeto por “disposiciones”, la fuerza, imposición social, etc.; pues ya que no se gana respeto hay que imponerlo. Se ha afectado mucho a la voluntad del ser humano, pues se ha llegado a tal confusión, en donde “mi opinión”, “mi pensamiento”, son premisas legales de vida, a tal punto que no se admite argumento contrario, con razón o no, es decir, se crea “el espacio”, “mi espacio”, el “soy yo”, afectando a la aceptación, la tolerancia y el respeto que dependen netamente de la voluntad, por lo que el entendimiento que se relaciona con la vivencia y la experiencia, se nubla muchas veces ocasionando muchos problemas, que van desde los más simples hasta los más complejos.

La mentalidad de consumismo ha influido tanto, que el irrespeto a los mayores es un sabor cotidiano en diferentes esferas, pues considerar la sabiduría de un adulto mayor es carente de sentido en algunas mentes, el valorar a una persona por su edad como un producto viejo, un no tomar en cuenta, su momento ya pasó, no está al tanto, o considerar que no es de actualidad, … , constituye un argumento “justificado y con razón”, sin ni siquiera imaginar o considerar su sensatez de vida, el valor de su experiencia, su renovación de vida personal y laboral en el quehacer diario, pues, … , el respeto a las canas, es mejor considerarlo como historia bonita, por lo que su destino adecuado es una casa geriátrica, cuando en el fondo lo que se piensa es en el espacio que ocupa, el visualizar a aquellas personas como “impedimento” a lo que se desea hacer, o el decir simplemente “nos estorban”.

Actualmente, el sentido de la fraternidad humana está muy distorsionado, al igual que el sentido de la libertad del ser humano, pues se refleja mucho en la convivencia laboral, pues no importa lo que se tenga que hacer, lo que se haga a otros para poder sobresalir, desencadenando muchas veces  la caída de aquella empresa, aquella entidad, cuyos responsables en un momento dado no visualizaron el verdadero fondo, confundir trabajadores que están para trabajar, antes que pensar en seres humanos que trabajan.

La ruta de desvalores también se encuentra en la familia en un momento dado, en el ejemplo inadecuado de padres, la actitud insensata de hijos, la desconsideración entre familias, entre vecinos, creándose escenarios de hasta violencia en ciertos momentos.

Todo cobarde siempre pide respeto de frente, pero no juega limpio a las espaldas. Una persona, por muy insignificante que sea, merece que se la respete, pues no existe nadie que no pida respeto para si mismo, hasta quien lo infringe.

La “ley de la vida” siempre recompensa con lo mismo o mejor lo que se hace en la existencia, y el irrespeto cobra factura.

Todo ser humano debe respetar a la autoridad, a sus padres, a sus hijos, a su familia, al adulto mayor, a su Patria, … , e indudable, el respeto inicia en casa.

Una persona de clase vive alimentando la discresión y el respeto, y este es el punto que se debe cultivar, fomentar, para que retomando este valor tan básico para convivir, haga vislumbrar soluciones que muchas veces no se ven, por la práctica de lo contrario, porque realmente donde hay respeto hay amor, donde hay amor está Dios.

Ser persistente

La persistencia alcanza lo que muchas veces desconocemos, como lo es el descubrir de lo que somos capaces ante la adversidad, los golpes de la vida, el desaliento, la derrota que nos impacta, …; escuché siempre a mi amigo Don Seba (Prof. Sebastián Alvarado Morejón) decir: «Al hombre se lo conoce cuando se levanta del piso, no cuando está de pie», y es una auténtica verdad.

Existen muchas adversidades que se nos pueden presentar en el camino: Económicas, fallecimiento de un ser querido, enfermedades, robos, engaños, defectos propios, …, que solamente con FE, las podemos superar, y he ahí, donde el poder de una convicción auténtica, es lo único que nos llevará adelante, ante todo, inclusive personas que por diferentes motivos, en buen criterio o no, nos pueden desestimular, sin embargo, ante ello está el SER PERSEVERANTE, en lo que es bueno, noble y justo.

Esta actitud es vital en todas las circunstancias de la vida: Familiares, personales, profesionales, defensa de nuestros valores, nuestros hijos, la enfermedad, etc., debido a la determinación que nos conduce, la preparación a las pruebas, en las que muchas veces, podemos pasar por momentos de sentirnos fracasados, cuando en realidad lo que está ocurriendo es un camino hacia el éxito, el que llegará en el momento preciso y en la instancia correcta de nuestra existencia.

El entrenamiento en este valor, comienza con el hacer de nuestras cosas, que una vez que las comenzamos las terminamos y bien hechas, sino no las hagamos, esto nos llevará a las grandes metas, comprendiendo con absoluta claridad que no hay logros sin persistencia, basándonos en nuestra auto-confianza, asumiendo nuestro costo que en su momento de trayecto a la meta nos representa más que el beneficio, pero basándonos en una disciplina propia en la que nuestra acción y acción deben ser dinámicas y no rígidas, de modo que podamos visualizar lo que debemos hacer.“La persistencia conquista a todos los críticos y aniquila obstáculos. Todos creen en un hombre con determinación. La gente sabe que cuando inicia algo, la batalla está mitad ganada porque su regla personal es que termina todo lo que comienza”.
Orison Swett Marden

Educar hoy


La necesidad de la educación en el ser humano hoy en día es más prominente, sobretodo con los niños y jóvenes actuales, que se encuentran en un mundo cuyo ambiente generalizado, mentalidad y cultura llevan a la duda del valor del ser humano y el reconocimiento de la verdad, lo que crea un clima difícil  para transmitir certezas y valores, ocasionando distorsiones en los caminos de vida de los educandos.

Un Educador debe disponer de cercanía y  confianza con sus educandos, porque dando de si mismo ayudará a superar en ellos sus egoísmos y orientándolos  hacia un amor auténtico de ser, encauzando en el trayecto hacia la verdad y el bien, siendo un testigo de los mismos, bajo plena conciencia de su misión.

En esto último, vale tener presente que el ser humano de ahora, escucha más a un testigo que a un docente, y si escucha a èste es porque es testigo, significando esto que vive la verdad que propone a su estudiante, ayudando sobremanera a superar el individualismo y el relativismo moral,  espiritual y religioso de la actualidad.

El relativismo moral

“El relativismo consiste en la postura que dice que la verdad de todo conocimiento o principio moral depende de las opiniones o circunstancias de las personas. Como las opiniones y las circunstancias son cambiantes, ningún conocimiento o principio moral, según esta postura, es objetivo o universal. Es decir, el relativismo postula que ningún conocimiento o principio moral es verdadero independientemente de las opiniones de las personas o de sus circunstancias, ni tampoco, por esa misma razón, es válido para todos en todo tiempo y lugar. En realidad, el relativismo, en cuanto al conocimiento de la realidad en general, deviene en agnosticismo (la negación, o la puesta en duda, de la capacidad del ser humano de conocer la verdad objetiva); y, en cuanto al conocimiento de lo moral, en individualismo o subjetivismo“.

Estas palabras nos ubican en nuestro entorno actual de convivencia humana tanto familiar, laboral, local, nacional e internacional, donde nos podemos encontrar con diferentes manifestaciones del ser humano, cuyas formas se pierden en el escepticismo, donde se postula que todas las posiciones son igualmente válidas, o pasan simplemente al campo de la opinión “personal” o “subjetiva”, por lo que la desconfianza en la verdad es la característica.
Se presenta una realidad en todos nosotros como seres humanos, que es, sobre todo en quienes decimos que somos católicos, el hecho de no analizar a fondo nuestra FE, conocer y educarnos en el pensamiento oficial de NUESTRA IGLESIA, y estar con un conocimiento base ante las corrientes filosóficas actuales, que en algunos casos buscan crear un nihilismo en las mentes de tal modo que no se debe asumir un compromiso definitivo, una convicción, un dogma, … , justificándose en el “hecho que todo es fugaz y provisional”.
Estas situaciones han trastornado la búsqueda de la verdad en sí misma, creando una “cultura” cuyo fin es la verdad subjetiva o una utilidad práctica, creándose caminos donde se separa la FE de la razón, para hacer de ella algo ilusorio y ser conceptuada como mito o superstición.
Sin caer en el plano pesimista, la sociedad actual se desencanta al encontrarse con la realidad de la pérdida de valores en muchos seres humanos, desvaneciéndose en algunos casos, “sustituidos” por otros y hasta fijados como “rarezas” al ser vistos y practicados por otros seres humanos.
El mundo actual se encuentra con la dificultad de encontrar la diferencia entre lo bueno y lo malo, sobretodo en la juventud, donde los estamentos educativos juegan un papel que en las vidas de los jóvenes y el futuro de ellos en comunidad, va a llegar a ser determinante, sobretodo porque ahora se pretende hacer creer que somos más libres que nunca, cuando realmente estamos más manipulados si no estamos preparados, en nuestra mente y nuestro espíritu.
El relativismo moral es en el fondo la ideología del pragmatismo, que se ve en diferentes espacios:
1. En la enseñanza, donde se presentan extremos como el irrespeto, la dicotomía y desidia docente, la inconsistencia entre filosofía, misión, visión y la vida real en determinados escenarios educativos, creando esto una incongruencia que se manifiesta en hechos, acciones y pensamientos contrarios a los que se promulga.
2. La orientación sexual, donde se crea el fundamento que todo vale, menos sus consecuencias, y si la sociedad legaliza una acción, entonces es correcto, fundamentando una visión individualista del ser humano, en la que “el hombre debe realizarse a sí mismo”, dado a que es un producto de la evolución, por tanto es libre de autodefinirse, negando de este modo una visión y moral cristianas, y a toda concepción del sentido mismo de nuestro ser.
3. En mentalizar que:
a. El relativismo en sí, es una virtud democrática, por lo que si en determinadas situaciones la mayoría está de acuerdo, ahí está la razón.
b. Llevar a Dios, la moral y la vida eterna es un plano subjetivo.
c. Considerar que toda opinión moral goza de la misma validez, negando toda jerarquía de ideas, el hecho de que unas sean verdaderas y otras no, así como la probabilidad de su certeza.
d. El respeto a la opinión de toda persona y su derecho a opinar. Es parte del discurso relativista, que se confunde con el deber de respetar toda opinión. Todos debemos respetar a los demás y sus opiniones, pero no tenemos que aceptar toda opinión por el simple hecho que no toda opinión es válida, y tenemos el deber de refutar si las circunstancias lo permiten, lo que no es correcto, en el grado que se lo requiera.
e. La verdad que es para unos no lo es para otros. Se pone el énfasis en el sujeto que opina y no en la realidad objetiva que se opina. De ahí las frases: “Todo el mundo tiene el derecho a opinar”, “es su opinión”, “¿quién es usted para decir tal cosa?, … , donde en el fondo lo que se busca es disponer de ambientes favorables a posturas particulares.
f. La relatividad es sincera y honesta. Esta presunción en la que lo que importa es la sinceridad subjetiva y no su conducta, es hacer creer que la persona al obrar sinceramente en tal situación, entonces está bien. En ningún momento se enfatiza la búsqueda de la verdad, como tampoco distingue entre una presunta sinceridad subjetiva y el bien o mal de sus actos.
El fundamento de que la verdad es relativa, es decir que lo que hoy es verdad mañana puede ser falso, lleva a detectar que el relativismo es contradictorio, ya que si la relatividad hoy se prescribe como tal, mañana será falso, es decir, pretende ser absoluta.
Indiscutiblemente, hay que distinguir entre aspectos que sí son relativos y otros que no lo son, y esta pretendida confusión en el ser humano, se ve reflejada en sus dimensiones, en las que se ve demandado de una mayor preparación, una mejor instrucción y sobretodo de una educación permanente en sí.
Esto nos lleva al campo del aforismo, que para entender al relativismo Luis Olivera Marañón los describe así:
1. NADA ES VERDAD NI NADA ES MENTIRA TODO DEPENDE DEL COLOR DEL CRISTAL CON QUE SE MIRA: niega la verdad absoluta.
2. PROHIBIDO PROHIBIR: ya se prohíbe algo.
3. TODO ES OPINABLE: todo menos esa afirmación.
4. LOS DOGMAS SON INADMISIBLES: lo son porque YO no los admito, no porque en sí mismos lo sean.
5. LIBERTAD DE PENSAMIENTO: 2 y 2 siempre serán 4. El relativismo se queda en lo primero y se olvida de lo segundo.
6. TODA IDEA, PRINCIPIO O CREENCIA ES TAN RESPETABLE COMO OTRA.
7. EDUQUEMOS EN LIBERTAD: significa dejar a un niño en libertad de educarse o no.

La respuesta ante todo esto, es indiscutiblemente la educación, y para quien se considere católico, demanda que preste siempre atención y tomar acción de acuerdo a su ámbito y posibilidades, que en conjunción con la Iglesia Católica, colaborará con la debida y bien entendida evangelización, que requiere que todos, tanto laicos y religiosos, y sobretodo autoridades eclesiásticas y de comunidades religiosas en el mundo, revisen al interior qué ocurre al respecto en el convivir diario, en media de una realidad compleja de vida, donde la responsabilidad ante Dios y la realidad de los actos deben ser congruentes con la Misión Fundamental de la Iglesia de conducir al ser humano hacia Dios como Él lo dispuso, por lo que las Comunidades Educativas Católicas están llamadas, como siempre, a obrar adecuadamente y no caer como parte de un abismo social, y no quedar en verdades utópicas documentales, más todo lo contrario, ser ejemplo vivo de una FE, que se solidifica siempre en CRISTO, y edifica la Salvación del hombre, que es lo que estas corrientes con sus diferentes matices y consecuencias minan en la conciencia del ser humano, alejándolo de su razón de ser.

Fuente:
http://www.catholic.net

Prof. Vicente Narea: Un llamado de Dios, a servir en la Obra Lasallana

Dialogando con el Maestro:Video

Hay vidas que el Creador las conduce para llevar a cabo  su misión, como con cualquiera de sus hijos, pero existen seres humanos que sabiendo escuchar, y tomando libremente su decisión, se entregan a la Voluntad Divina para cumplir con felicidad lo que EL ha encomendado.Conocido por muchos exalumnos y familias lasallanas en Guayaquil, por su entrega, sacrificio y don de Maestro, su espíritu y su existencia demuestran lo que es el valor de una vida donada a otras vidas, para que triunfen en los caminos de este mundo.Su hogar refleja la paz propia de aquellas familias, que acogen e invitan a estar, porque se respira y se siente unión, hermandad y sobretodo amor. Lo que es un claro y vivo ejemplo, para todos.El reconocimiento que el Gobierno Nacional del Ecuador, por medio del Presidente de la República Econ. Rafael Correa Delgado, es indiscutiblemente, más allá de un justo reconocimiento, la demostración de un aprecio que todos debemos tener  con aquellas personas que merecen nuestro respeto, consideración, estima y dignas de ejemplo para la vida de todos los ecuatorianos sobretodo en el ámbito educativo, y sin discusión alguna es para que los que estamos en el Mundo Lasallano tributemos lo que nos corresponde, sobretodo con nuestro existir, porque ahí está elverdadero sentido de todo.!!Felicitaciones al Maestro!!         !!Muy bien, Sr. Presidente!!
Prof. Vicente Narea Sosa
Prof. Vicente Narea Sosa
San Juan Bautista De La Salle
San Juan Bautista De La Salle

 

Entre sus reconocimientos:

PLACA DE RECONOCIMIENTO 18AVA PROMOCION
18AVA PROMOCION

 

PLACA DE RECONOCIMIENTO DEL SAN JOSE EN EL AÑO JUBILAR
SAN JOSE EN EL AÑO JUBILAR

 

 

UN APRECIO DE UN EXALUMNO
UN APRECIO DE UN EXALUMNO
   

Mensaje de George Carlin

GEORGE CARLIN (comediante de los años 70 y 80) escribió esto, ahora que recientemente murió su esposa.

George Carlin
MENSAJE POR GEORGE CARLIN:
«La paradoja de nuestro tiempo es que tenemos edificios más altos y temperamentos más reducidos, carreteras mas anchas y puntos de vista mas estrechos. Gastamos más pero tenemos menos, compramos más pero disfrutamos menos. Tenemos casas más grandes y familias más chicas, mayores comodidades y menos tiempo. Tenemos mas grados académicos pero menos sentido común, mayor conocimiento pero menor capacidad de juicio, mas expertos pero mas problemas, mejor medicina pero menor bienestar.
Bebemos demasiado, fumamos demasiado, despilfarramos demasiado, reímos muy poco, manejamos muy rápido, nos enojamos demasiado, nos desvelamos demasiado, amanecemos cansados, leemos muy poco, vemos demasiada televisión y oramos muy rara vez.

Hemos multiplicado nuestras posesiones pero reducido nuestros valores. Hablamos demasiado, amamos demasiado poco y odiamos muy frecuentemente.

Hemos aprendido a ganarnos la vida, pero no a vivir. Añadimos años a nuestras vidas, no vida a nuestros años. Hemos logrado ir y volver de la luna, pero se nos dificulta cruzar la calle para conocer a un nuevo vecino. Conquistamos el espacio exterior, pero no el interior. Hemos hecho grandes cosas, pero no por ello mejores.

Hemos limpiado el aire, pero contaminamos nuestra alma. Conquistamos el átomo, pero no nuestros prejuicios. Escribimos más pero aprendemos menos. Planeamos más pero logramos menos. Hemos aprendido a apresurarnos, pero no a esperar. Producimos computadoras que pueden procesar mayor información y difundirla, pero nos comunicamos cada vez menos y menos.

Estos son tiempos de comidas rápidas y digestión lenta, de hombres de gran talla y cortedad de carácter, de enormes ganancias económicas y relaciones humanas superficiales. Hoy en día hay dos ingresos pero más divorcios, casas mas lujosas pero hogares rotos. Son tiempos de viajes rápidos, pañales deshechables, moral descartable, acostones de una noche, cuerpos obesos, y píldoras que hacen todo, desde alegrar y apaciguar, hasta matar. Son tiempos en que hay mucho en el escaparate y muy poco en la bodega. Tiempos en que la tecnología puede hacerte llegar esta carta, y en que tú puedes elegir compartir estas reflexiones o simplemente borrarlas.
§ Acuérdate de pasar algún tiempo con tus seres queridos porque ellos no estarán aquí siempre.
§ Acuérdate de ser amable con quien ahora te admira, porque esa personita crecerá muy pronto y se alejara de ti.
§ Acuérdate de abrazar a quien tienes cerca porque ese es el único tesoro que puedes dar con el corazón, sin que te cueste ni un centavo.
§ Acuérdate de decir te amo a tu pareja y a tus seres queridos, pero sobre todo dilo sinceramente. Un beso y un abrazo puedes reparar una herida cuando se dan con toda el alma.
§ Acuérdate de tomarte de la mano con tu ser querido y atesorar ese momento, porque un día esa persona ya no estará contigo.
§ Date tiempo para amar y para conversar, y comparte tus mas preciadas ideas.»
Y siempre recuerda:
«La vida no se mide por el número de veces que tomamos aliento, sino por los extraordinarios momentos que nos lo quitan»
George Carlin.

El Educador Católico de Hoy – ¿Qué enfrenta?

Identificarnos como Educadores Católicos en la actualidad, nos llama a no serlos ni por palabras, ni por apariencias y menos aún no serlos de verdad. En la era en que vivimos nos es claro a todos que la crisis del pensamiento humano es notable, a tal punto que existen laberintos y muchos caminos falsos y equivocados, que desvían del verdadero camino que debe seguir el hombre, es  decir, que la búsqueda de la verdad se encuentra oscurecida hasta en la concepción mental del hombre mismo y más aún en su interior.

Cristo Maestro

El mundo actual se encuentra muy marcado por el pecado de la acedia, en muchos campos de acción del ser humano, y la educación no se encuentra excepta de ello. No lo «notamos» o no lo queremos ver, tal vez porque no lo percibimos o no lo observamos, o somos consecuencia o consecuentes con una civilización que nos invita, nos contagia y nos hace hacia ella, … , nos transforma a ser  acédicos.

Esta «pereza espiritual», esta «homologación con el mundo», es lo que nos puede ocurrir o nos está ocurriendo ya, de tal modo que nuestras vidas y por ende en las acciones con nuestros educandos, nos podemos encontrar con el riesgo de estar cometiendo este pecado capital, donde lo que ocurre en el fondo es una práctica de valores (más bien invalores) de vida, donde lo que estamos reflejando realmente es una crisis de sentido de lo que hacemos.

Lo podemos observar, desde detalles «menores», en nuestro simple cumplimiento de horarios y trabajo, la monotonía de los días, el sin sentido de lo que hacemos, …; y si avanzamos en el tiempo, lo veremos en los resultados académicos y humanos de los estudiantes, y más adelante en el futuro de ellos viviendo en sociedad.

La Educación Católica se enfrenta al mundo en el terreno de los valores, y ésta es una realidad de siempre, pero ahora con más fuerza que nunca. Es así, que los valores cristianos se enfrentan con los valores laícos creados, donde algunos de ellos menosprecian a los nuestros con una nube de conocimientos relativos de existencia, que terminan agobiándonos espiritual e intelectualmente.

La dignidad de nuestra labor está en el progreso de nuestro esfuerzo personal en pos de llevar a Dios a nuestros educandos, no como queremos o como creemos, sino como EL lo dice, indiferente de la época en que vivimos. Estos valores que debemos promulgar debemos entenderlos desde la transcendencia de nuestras vidas, porque el SEÑOR siempre ha sido el mismo en todas las épocas, y no es que antes o ahora es otro. Esta labor de custodio permanente de valores cristianos, nos demanda también prudencia, para reconocer el campo donde nos desenvolvemos, la misma que nos demanda responsabilidad, teniendo una profunda conciencia de lo que hacemos, y estar atentos a no estar haciendo lo que no debemos.

De igual manera debemos estar conscientes, de ser solidarios en la vida, donde mucho influirá la solidez de nuestra formación moral, inclusive hasta en momentos de desacuerdo con nuestros hermanos, pero es indudable que donde hay fortaleza en valores, más pesa el sentido de unión y comprensión que una actitud acédica, que se puede manifestar en un mal entendido pluralismo en un momento dado, es decir, hay que ser tolerantes con las personas pero no con los principios.

Vivimos en el fondo un desafío en los tiempos actuales, y que son muy difíciles. Por tanto, nuestra labor es eminentemente pastoral, desde el campo en que nos encontremos, y el tema más importante en esto, es que: El hombre es más que el mensaje. El mensaje es creíble cuando el hombre lo es.

El modelo de hombre lo tenemos en Cristo, que no es de los religionistas o filósofos, sino de DIOS. Por lo que debemos ser hombres de DIOS, es decir aquellos  que desean hacer la VOLUNTAD DE EL, no externamente, sino motivados internamente por un deseo espiritual creado por DIOS mismo.

Debemos darnos cuenta que en estos tiempos difíciles se necesita ser fuerte, darnos cuenta que en nuestro alrededor próximo o lejano, los estándares morales absolutos se los remplaza por una ética situacional, lo bueno y lo malo se remplaza por lo que es políticamente correcto, la filosofía humana se degenera en el egoismo, … , es decir, la verdad retrocede. Esto hace que el mundo se transforme y se cree el temor en el ser humano, y es el miedo el que hace que el corazón del hombre falle.

Es así, que debemos ser conscientes del llamado que tenemos, y tener muy claro que nada hay más relevante en nuestro planeta que la Palabra de DIOS. ¿Qué se le compara?. Por eso es que nuestra fundamento está en ser hombres de DIOS, para que nos transforme en el modo y esencia que nos necesite donde estemos, de modo que estemos preparados cuando lleguen los momentos en que debemos actuar.

 

 

 

 

 

El profesor emocionalmente competente

Navegando en Internet me encontré con el sitio de la Profesora Maggie Castro Velasco de Chile, quien hace mención a un libro que todo Docente debe leer:

Libro

 

 

Porque es una lectura lectura que nos invita a meditar a todos los que en una u otra forma se encuentran en una comunidad educativa, y para quienes somos Docentes, nos invita a una reflexión cuya práctica siempra ha sido, pero que en la actualidad tiene más fuerza en la labor hacia los educandos.